The reason is you...

Instantes.

Si pudiera vivir nuevamente mi vida,
en la próxima trataría de cometer más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría más riesgos,
haría más viajes,
contemplaría más atardeceres,
subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares adonde nunca he ido,
comería más helados y menos habas,
tendría más problemas reales y menos imaginarios.

Yo fuí una de esas personas que vivió sensata
y prolíficamente cada minuto de su vida;
claro que tuve momentos de alegría.
Pero si pudiera volver atrás trataría
de tener solamente buenos momentos.

Por si no lo saben, de eso está hecha la vida,
sólo de momentos; no te pierdas el ahora.

Yo era uno de esos que nunca
iban a ninguna parte sin un termómetro,
una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas;
si pudiera volver a vivir, viajaría más liviano.

Si pudiera volver a vivir
comenzaría a andar descalzo a principios
de la primavera
y seguiría descalzo hasta concluir el otoño.
Daría más vueltas en calesita,
contemplaría más amaneceres,
y jugaría con más niños,
si tuviera otra vez vida por delante.

Pero ya ven, tengo 85 años...
y sé que me estoy muriendo.

J.

Verónica.

Leyendo mi carta de presentación del año pasado me he dado cuenta de lo que podemos llegar a aprender en todo un año, todo aquello que nos pasa nos sirve para algo, para superar aquello que antes nos daba miedo hacer o para aprender que es lo que en verdad no debemos hacer, para caer y superarnos poco a poco. Para crecer como persona.

Han cambiado tantas cosas…pero hay cosas que nunca cambian, aquello que dura un instante puede marcar tu vida para siempre.

Y bueno tras esta pequeña “reflexión”, comenzaré (de nuevo y renovada) presentándome.

Tengo 19 años y me llamo Verónica, pero me gusta que me digan Vero, nunca me ha gustado que me llamasen por mi nombre entero…ya que cada vez que alguien lo hace parece que me están regañando, como bien lo hacían mis padres cuando algo no les gustaba…

Hace ya dos años, que dejé mi pueblo, Yecla, para venir a vivir a Murcia y estudiar para ser maestra, que es lo que siempre me ha gustado y guiado mi vida.

Me encantan los niños, como es de suponer, sino no estaría aquí, su espontaneidad, creatividad,  alegría, sinceridad e inocencia son características que compartimos, por eso me gusta tanto tratar con ellos.

Mis hobbies, podría escribir un libro de ellos, pero el que más me gusta y al que más tiempo dedico es a la pintura, dibujando…soy alguien distinta, separada de la realidad, me hace estar como en otro mundo, mundo que también comparto con la escritura y la poesía. Pasear, nadar, bailar, tocar el piano, investigar…

Me gustan las películas que me hacen reír y llorar, aquellas que me puedan aportar algo que antes no sabía y libros de esos que enganchen desde la primera página hasta la última. En cuanto a la música que escucho, no tengo un “estilo determinado”, siempre busco aquellas canciones que me hagan sentir bien en el momento oportuno, intento poner mi propia melodía a mi vida.

No me gusta la arrogancia, la impaciencia ni el egoísmo.

Vaya, acabo de darme cuenta que “he superado” la expectativa del año pasado “Vencer el miedo escénico"... 

Y por ahora, mi expectativa sería mantener lo conseguido, mejorar lo presente y marcar lo futuro.

                                                                                                 Verónica.

Letras.

Devoro libros como devoro sueños. La literatura es mi vía de escape preferida. Un hilo que nos eleva a otros mundos, historias, trazos de esperanzas… Estoy enamorada de la literatura…y es que no hay mejor compañero de viaje, que un buen libro.

V.F

You take my breath away...

Como el vino.

Las cosas de esta vida...como el vino con el tiempo se saborean mejor. Por que creo que una de las mejores virtudes que puede tener el ser humano es la paciencia, paciencia para hacer las cosas, paciencia para disfrutar lo que haces como si fuese el último instante de tu vida, paciencia para conocerte, para esperar, para enseñar y para que te enseñen, y es que las cosas salen mejor cuando se saborean poco a poco...tiempo para crecer y avanzar, es lo único que ahora queda por delante.

F.

Solamente tú.

Regálame tu risa, enseñame a soñar con sólo una caricia me pierdo en este mar.

 Regálame tu estrella, la que ilumina esta noche, llena de paz y de armonía, y te entregaré mi vida...
Haces que mi cielo vuelva a tener ese azul, pintas de colores mis mañanas solo tú navego entre las 

olas de tu voz y  solamente tú haces que mi alma se despierte con tu luz...

Enseña tus heridas y así la curará que sepa el mundo entero que tu voz guarda un secreto no menciones tu nombre que en el firmamento... que se mueren de celos tus ojos son destellos y tus palabras son un misterio...

¿ Se puede querer lo que no ves ?

París.

Todo lo bueno acaba... Pero tengo la virtud o el defecto de guardarme lo bueno para quien se lo merece, pero ya lo sabes siempre nos quedará París.

                                                                                                                                         F.